El dilema inicial al empezar en el mundo camper: Qué furgoneta camper elegir
Cuando alguien empieza a soñar con la vida nómada sobre ruedas, aparece unas preguntas que lo condiciona todo: ¿qué tamaño de furgoneta es el ideal para camperizar?¿Qué furgoneta camper elegir?. La decisión no es tan simple como escoger el primer modelo atractivo que veamos en un anuncio de segunda mano. De hecho, probablemente sea una de las elecciones más determinantes que harás si quieres lanzarte al mundo camper, porque el tamaño marcará el tipo de viajes que podrás hacer, el confort del día a día, el consumo de combustible y hasta la facilidad para aparcar en tu propia calle.
La duda inicial suele girar en torno a tres factores: cuántas personas van a viajar, qué uso se le va a dar a la furgoneta y qué lugares se quieren visitar habitualmente. Por ejemplo, una pareja que busca escapadas de fin de semana a la montaña no necesita el mismo espacio que una familia con dos hijos que pretende recorrer Europa durante todo un verano. Del mismo modo, alguien que vive en ciudad agradecerá una furgoneta baja que entre en cualquier parking, mientras que quien huye del asfalto en busca de playas solitarias o rutas de montaña puede sacrificar comodidad urbana por espacio interior.
En este sentido, no hay una respuesta universal. El secreto está en conocer bien las posibilidades que ofrece cada tamaño de furgoneta y compararlas con lo que realmente necesitas. A continuación, nos centraremos en las tres grandes categorías: pequeñas, medianas y gran volumen, para que veas pros, contras, ejemplos reales y casos de uso.
Qué furgoneta camper elegir: Furgonetas camper pequeñas
Las furgonetas pequeñas suelen ser la puerta de entrada al mundo camper. Técnicamente, hablamos de modelos con un volumen de carga entre 3 y 7 metros cúbicos, longitudes que oscilan entre 4,40 y 5 metros, anchuras cercanas a 1,80 metros y alturas contenidas (generalmente por debajo de los 2 metros). Estas dimensiones las convierten en las más manejables del mercado y las que menos se alejan de la conducción de un coche convencional.
Características principales
- En este tamaño, el espacio interior es reducido, por lo que la camperización suele ser muy básica.
- Lo más habitual son módulos traseros extraíbles con cama y cocina integrada.
- En algunos modelos se opta por asientos traseros abatibles, que se convierten en superficie de descanso.
- El espacio interior no permite estar de pie, salvo que se instale un techo elevable (algo poco frecuente por el coste que implica en este segmento).
- Suelen tener consumos bajos: entre 6 y 8 litros cada 100 km en diésel, aunque en trayectos urbanos el gasto puede ser algo mayor.
- Son furgonetas muy discretas: a ojos de cualquiera parecen un vehículo familiar grande, lo que aporta seguridad cuando se duerme en ciudad.
Pros de las furgonetas pequeñas
- Maniobrabilidad excelente: permiten acceder a calles estrechas, parkings subterráneos y centros urbanos sin problemas.
- Fáciles de aparcar: caben en una plaza de coche estándar, lo que reduce mucho el estrés de encontrar sitio en ciudad o pueblos pequeños.
- Coste reducido: tanto en la compra como en el mantenimiento, ya que comparten muchos repuestos con turismos.
- Consumo contenido: ideales para quienes hacen muchos kilómetros y quieren reducir el gasto en combustible.
- Versatilidad: sirven tanto como vehículo de uso diario como para viajes esporádicos, lo que evita tener dos coches en casa.
Contras de las furgonetas pequeñas
- Espacio limitado: obliga a soluciones minimalistas. No hay lugar para un baño fijo, y la cocina suele ser portátil.
- Confort reducido: en viajes largos puede resultar incómodo montar y desmontar la cama cada día.
- Poca capacidad de almacenaje: ideal para escapadas cortas, pero insuficiente si quieres llevar material deportivo, equipo de trabajo o viajar más de dos personas con equipaje.
- Imposible estar de pie: salvo que inviertas en un techo elevable, tendrás que moverte siempre agachado dentro.
¿Para quién son recomendables?
Las furgonetas pequeñas son la elección perfecta para quienes:
- Viajan solos o en pareja y priorizan la movilidad frente al confort.
- Buscan un vehículo multiuso, tanto para viajes como para el día a día.
- Hacen escapadas cortas, fines de semana o vacaciones de verano, pero no largas estancias.
- Valoran pasar desapercibidos y poder dormir en ciudad sin llamar la atención.
Un perfil muy habitual es el de jóvenes que trabajan entre semana y aprovechan cada viernes para salir de viaje. Llegan, abaten asientos, montan cama y listo. También quienes empiezan en la vanlife y quieren probar sin hacer una gran inversión inicial.
Ejemplos de modelos habituales
- Nissan NV300: opción económica con motores diésel robustos y muy usada en camperizaciones básicas.
- Opel Vivaro: modelo versátil con buena relación entre espacio y consumo.
- Fiat Doblo: más compacto, pensado para escapadas rápidas y presupuestos ajustados.
- Citroën Berlingo: uno de los más populares en España, con infinidad de kits camper disponibles.
Casos de uso reales
Imagina una pareja que vive en una gran ciudad. Durante la semana usan su furgoneta para trabajar, moverse o hacer recados. El viernes, cargan una nevera portátil, un colchón plegable y un hornillo de gas, y en menos de 20 minutos tienen todo listo para un fin de semana de playa o montaña. A la vuelta, desmontan los módulos y vuelven a tener un vehículo práctico para la vida diaria.
Sin embargo, si quisieran vivir un año entero en esa misma furgoneta, pronto aparecerían las limitaciones: falta de espacio para guardar ropa, imposibilidad de cocinar dentro en días de lluvia, o incomodidad al tener que montar y desmontar cama constantemente. Por eso, aunque son una gran opción de entrada, a la larga muchos usuarios acaban dando el salto a modelos medianos o gran volumen.

Qué furgoneta camper elegir: Furgonetas camper medianas
Las furgonetas medianas son, para muchos, el punto intermedio perfecto entre las pequeñas y las gran volumen. No son tan limitadas como una Berlingo ni tan aparatosas como una Ducato larga, y por eso han sido las favoritas de quienes buscan un equilibrio real entre espacio habitable y facilidad de conducción.
En cuanto a medidas, suelen tener un volumen de carga de entre 7 y 12 metros cúbicos. La longitud típica se mueve en torno a los 5,00 – 5,40 metros, con una anchura media de 1,90 metros y una altura de entre 1,90 y 2,00 metros. Estas dimensiones permiten ya una distribución más variada, aunque con limitaciones si se quiere convertir la furgoneta en vivienda permanente.
Características principales
- Se suelen clasificar con las nomenclaturas L1H1, L2H1 o L2H2, aunque lo más habitual en este segmento es la L1H1:
- L1 = longitud corta (aprox. 5 metros).
- L2 = longitud media (unos 5,40 metros).
- H1 = altura baja, por debajo de los 2 metros.
- H2 = altura media, donde ya es posible instalar un pequeño baño o muebles altos.
- En configuraciones H1 no es posible estar de pie dentro de la furgoneta, lo que limita la comodidad en el día a día. La solución más habitual es instalar un techo elevable, que permite ganar altura y, en muchos casos, añadir una cama extra en la parte superior.
- En el interior, las distribuciones más comunes incluyen:
- Módulo lateral con pequeña cocina y armarios bajos.
- Cama convertible a partir de un banco trasero o estructura abatible.
- Espacio trasero libre para cargar bicicletas, tablas de surf o material de aventura.
- El consumo medio suele rondar los 7 a 9 litros a los 100 km, lo que supone un aumento respecto a las pequeñas, pero todavía mucho más eficiente que una gran volumen.
- Su estética es menos “coche” y más claramente furgoneta, aunque modelos como la Volkswagen California han hecho que este segmento tenga un aire aspiracional muy marcado.
Pros de las furgonetas medianas
- Equilibrio entre espacio y movilidad. Ofrecen suficiente espacio para incluir una pequeña cocina fija, una cama doble y almacenamiento para dos personas sin ser demasiado voluminosas.
- Versatilidad en camperización. Son muy agradecidas a la hora de diseñar interiores: se pueden hacer proyectos sencillos con módulos portátiles o instalaciones más completas con techo elevable.
- Consumo moderado. Aunque gastan más que una furgoneta pequeña, siguen siendo mucho más eficientes que una gran volumen.
- Compatibles con el día a día. A pesar de su tamaño, aún es posible usarlas como vehículo de diario en ciudades medianas o pueblos.
- Acceso a parkings. En su versión H1, muchas pasan bajo los 2 metros de altura, lo que abre la puerta a usar parkings subterráneos.
Contras de las furgonetas medianas
- Altura limitada. En versiones H1 no se puede estar de pie, y eso pasa factura en viajes largos: cocinar, cambiarse de ropa o moverse dentro puede ser incómodo.
- Baño casi imposible. El espacio no da para instalar un baño fijo completo. Como mucho, un WC químico portátil o ducha exterior.
- Aparcamiento en ciudad. Aunque no son enormes, su longitud superior a 5 metros ya complica el encaje en plazas normales.
- Precio elevado. Modelos populares como la Volkswagen T6 California se mueven en cifras muy altas, incluso en segunda mano.
- Dependencia del techo elevable. Para que sean realmente cómodas, casi siempre hay que recurrir a un techo elevable, lo que encarece bastante la camperización.
¿Para quién son recomendables?
Las furgonetas medianas son perfectas para quienes:
- Viajan en pareja o con un niño pequeño.
- Quieren un vehículo para escapadas de vacaciones de 1 a 3 semanas.
- Buscan equilibrio: algo manejable que ofrezca más confort que una pequeña pero sin llegar al volumen de una Ducato.
- Necesitan espacio para material deportivo o de aventura, pero no quieren cargar con un “monstruo” de 6 metros.
Este tamaño encaja muy bien con perfiles de viajeros activos: surfistas, escaladores, ciclistas o amantes de la montaña que quieren moverse rápido y tener su base lista en pocos minutos.
Ejemplos de modelos populares
- Volkswagen T6 California: el icono de las furgonetas medianas. Compacta, con techo elevable de serie y acabados de calidad. También con uno de los precios más altos del mercado.
- Mercedes Vito: un clásico de camperizaciones personalizadas. Estética cuidada y motores fiables, con mucha comunidad de usuarios detrás.
- Renault Trafic: opción muy versátil y algo más económica. Su tamaño intermedio la convierte en candidata perfecta para proyectos caseros de camperización.
El techo elevable: el gran aliado
Una de las grandes ventajas de este segmento es la posibilidad de instalar un techo elevable. Con él, la furgoneta gana altura interior suficiente para moverse de pie y, además, una cama adicional para dos personas en la parte superior.
Esto convierte a la furgoneta en una especie de “miniautocaravana compacta”: abajo queda la zona de día (cocina, comedor, cama convertible), y arriba una cama lista para dormir sin necesidad de montar nada.
El inconveniente está en el precio: un techo elevable puede costar entre 5.000 y 8.000 euros, dependiendo de si es manual o eléctrico, y si se monta nuevo o de segunda mano. Sin embargo, para muchos usuarios marca la diferencia entre una furgoneta para escapadas y un vehículo habitable durante meses.
Casos de uso reales
Imagina una pareja que quiere recorrer la costa norte de España durante un mes. Con una furgoneta mediana equipada con techo elevable, pueden dormir cómodamente dos arriba y dejar la zona de abajo siempre disponible para comer, cocinar o trabajar con el portátil en días de lluvia.
Otro ejemplo: un escalador que viaja solo o en pareja con todo su equipo. Una Trafic o una Vito le permiten llevar colchonetas, cuerdas y material sin renunciar a tener un espacio para dormir y cocinar.
La clave está en que las medianas ofrecen un confort suficiente para viajes medios o largos, sin llegar a ser tan pesadas y difíciles de aparcar como una gran volumen.

Qué furgoneta camper elegir: Furgonetas camper gran volumen
Si las pequeñas son el primer paso y las medianas el equilibrio, las furgonetas gran volumen representan el salto definitivo hacia la comodidad y la habitabilidad total. Son las favoritas de quienes buscan pasar largas temporadas en ruta o directamente vivir a tiempo completo en su vehículo.
En este segmento, el volumen de carga suele oscilar entre los 12 y los 17 metros cúbicos, con longitudes que van desde los 5,40 metros (L2) hasta más de 6,40 metros (L4). La altura también varía, siendo habitual la H2, que ya permite estar de pie con comodidad, y la H3, que añade todavía más espacio interior y la posibilidad de instalar muebles altos y zonas de almacenaje extra.
Características principales
- Permiten instalaciones completas: cama fija, baño con ducha, cocina equipada, salón comedor y armarios altos y bajos.
- Son las más amplias y también las más cuadradas, lo que facilita distribuciones variadas.
- Se clasifican en longitudes L2, L3 y L4 y alturas H2 y H3.
- El consumo medio suele estar entre 8 y 11 litros cada 100 km, dependiendo de motor y carga.
- Su mayor volumen requiere motores más potentes y un buen mantenimiento, aunque son mecánicas muy probadas en el mercado europeo.
Pros de las furgonetas gran volumen
- Espacio y confort: son las únicas que permiten tener baño fijo, cama grande y zonas diferenciadas para dormir, cocinar y trabajar.
- Altura interior: en versiones H2 y H3 se puede estar de pie sin problema, y en las H3 incluso ganar altillos y armarios adicionales.
- Autonomía real: con depósitos de agua grandes, baterías y placas solares, se convierten en auténticas casas rodantes.
- Aislamiento y distribución: permiten proyectos de camperización muy completos, comparables a una autocaravana.
Contras de las furgonetas gran volumen
- Consumo más elevado, especialmente en versiones largas o cargadas.
- Maniobrabilidad reducida: en ciudad pueden ser un problema, tanto para aparcar como para moverse en calles estrechas.
- Restricciones de altura: con más de 2,60 metros, muchos parkings están vetados.
- Coste más alto: tanto la base como la camperización son más caros.
¿Para quién son recomendables?
Las gran volumen son ideales para quienes quieren vivir en la furgoneta todo el año o hacer viajes largos con la máxima comodidad posible. También para familias con niños, viajeros que no quieren renunciar a tener baño fijo y personas que buscan una sensación cercana a la de una autocaravana, pero con la flexibilidad de una furgoneta.
En resumen: si lo que buscas es espacio y autonomía, este es tu segmento.
Ejemplos de modelos populares
- Fiat Ducato: la más usada en Europa, por su forma cuadrada y anchura interior que facilita camperizaciones.
- Mercedes Sprinter: robusta y con motores potentes, muy apreciada aunque más estrecha.
- Volkswagen Crafter: similar a la Sprinter, fiable pero también más estrecha que la Ducato.
- Ford Transit: otra alternativa económica y resistente, con buena disponibilidad en el mercado de segunda mano.

Nuestra experiencia: qué furgoneta camper elegimos
Cuando llegó el momento de qué furgoneta camper elegir, sabíamos que íbamos a vivir en ella a tiempo completo, y eso lo cambió todo. Teníamos claro que necesitábamos espacio de almacenaje, un baño fijo aunque fuese pequeño, y sitio suficiente para poder recibir amigos en ruta. Dudamos entre la L3 y la L4, y aunque Jota era más partidario de la L4 por amplitud, a Belén le preocupaba que rozara en caminos complicados. La altura H3 también nos atraía muchísimo, porque ofrecía más sensación de amplitud y almacenaje, pero no era fácil encontrar una en buen estado en el mercado de segunda mano.
Otro factor importante fue que no solemos visitar grandes ciudades, así que el tema de restricciones de altura o aparcamiento urbano no nos preocupaba demasiado. En cambio, sí nos gusta meternos por caminos de montaña, y ahí una furgoneta demasiado larga podía convertirse en un problema. Además, descartamos la Sprinter y la Crafter por ser más estrechas, y nos centramos en las más cuadradas y anchas: Fiat Ducato, Peugeot Boxer o Citroën Jumper.
Finalmente apareció una oportunidad única: una Fiat Ducato L3H2 del 2007 con motor de cadena de 160 cv, apenas 170.000 km, sin AdBlue, de un único propietario y en un estado impecable. Solo se había usado para transportar material de una ferretería de pueblo, sin óxidos, con buen mantenimiento y muy cerca de casa. La vimos publicada a las pocas horas, contactamos al instante y pedimos una prueba mecánica. Pasó la revisión sin problemas, más allá de un golpe lateral sin importancia y unas ruedas que había que cambiar.
Ese mismo día, prácticamente al salir del taller, ya era nuestra. Hoy, después de más de un año viviendo en ella, podemos decir que fue una gran elección. Sí, seguimos pensando que una H3 hubiera sido ideal para no golpearnos en el techo del comedor y ganar más almacenaje, pero aún así nos sentimos afortunados. Ha demostrado ser fiable, cómoda y con el espacio justo que necesitábamos.
Vivir en ruta con la elección adecuada
Mirando hacia atrás, podemos decir que cada tamaño de furgoneta tiene su sentido y su momento. Las pequeñas son geniales para escapadas rápidas, las medianas para viajes cómodos sin complicarse demasiado, y las gran volumen para dar el salto a una vida nómada con todas las comodidades. No existe una furgoneta perfecta para todos: la elección dependerá siempre de tus planes de viaje, tu presupuesto y el estilo de vida que quieras llevar.
Esto es sólo una guía de qué furgoneta camper elegir, con consejos prácticos. Esto no quiere decir que no puedas vivir viajando en una furgoneta camper pequeña. Tampoco que sí o sí necesites una grande, sólo pretendemos guiar con nuestra experiencia, pero sabemos que hay tantas furgonetas como tipos de viajeros. No te ates a estos consejos y ante la duda, prueba todo tipo de furgonetas, alquila y comprueba cuál es la que de verdad se acomoda a ti. Sólo así podrás saber qué furgoneta camper elegir.
Y tú, ¿qué elegirías?
¿Prefieres la libertad y discreción de una pequeña, el equilibrio de una mediana o el confort de una gran volumen?
Cuéntanos en los comentarios cuál sería tu elección y por qué, ¡seguro que tu experiencia ayuda a otros viajeros que están decidiendo qué camino tomar!
Preguntas frecuentes: Qué furgoneta camper elegir
¿Qué diferencia hay entre una furgoneta camper pequeña, mediana y gran volumen?
La principal diferencia está en el espacio disponible, el confort y la facilidad de conducción. Una furgoneta pequeña es ideal para escapadas rápidas y tiene consumos muy bajos, pero obliga a montar y desmontar cama y cocina cada día. Una mediana ofrece más versatilidad y equilibrio: permite cocinar dentro, llevar material deportivo y con techo elevable se convierte en una opción muy cómoda para vacaciones largas. Las gran volumen son auténticas casas rodantes, con baño fijo, cama amplia y mucho almacenaje, pensadas para vivir en ellas o viajar largas temporadas.
¿Cuál es el consumo medio de cada tipo de furgoneta?
El consumo depende de factores como el motor, el peso y la forma de conducir, pero se pueden establecer medias orientativas. Las pequeñas gastan entre 6 y 8 litros cada 100 km, lo que las hace muy económicas para viajar. Las medianas suelen estar en torno a los 7 a 9 litros cada 100 km, una cifra moderada para el confort que ofrecen. Por su parte, las gran volumen se mueven entre 8 y 11 litros cada 100 km, con variaciones importantes según la carga y el tipo de trayecto, especialmente en montaña o ciudad.
¿Es posible instalar un baño fijo en todas las furgonetas camper?
No. El espacio interior es el factor que lo determina. En una furgoneta pequeña resulta prácticamente imposible instalar un baño fijo; lo más habitual es llevar un WC portátil y una ducha exterior. En una mediana, aunque hay inventos, sigue siendo complicado porque el espacio se sacrifica en otras áreas, salvo que sea una H2 con techo elevable. En cambio, las gran volumen sí permiten instalar un baño fijo con ducha, lavabo e incluso inodoro químico o seco, integrando depósitos de agua limpia y sucia que garantizan una autonomía mayor.
¿Qué tamaño de furgoneta es más recomendable para vivir en ella a tiempo completo?¿Qué furgoneta camper debo elegir?
Depende del estilo de vida, pero en general, una gran volumen es la más adecuada para vivir todo el año. Ofrece altura suficiente para moverse de pie, espacio para una cama fija, un baño integrado y almacenamiento para ropa, comida y equipo de viaje. Sin embargo, hay personas que viven en medianas con techo elevable y han encontrado un equilibrio perfecto entre movilidad y confort. Las pequeñas se adaptan más a escapadas o temporadas cortas, ya que carecen de espacio suficiente para una vida cómoda y práctica en el día a día.
¿Qué ventajas tiene una furgoneta mediana con techo elevable?
El techo elevable es la solución estrella en las furgonetas medianas. Al desplegarlo, permite estar de pie en el interior y, además, añade una cama doble adicional en la parte superior. Esto transforma la furgoneta en una especie de “miniautocaravana compacta”: abajo se mantiene el comedor y la cocina, mientras arriba se duerme cómodamente. Además, al cerrarlo, la altura del vehículo sigue siendo reducida, lo que permite entrar en parkings y moverse por ciudad con facilidad. El único inconveniente es el precio, que suele oscilar entre 5.000 y 8.000 euros según modelo y sistema.
¿Qué modelos de furgonetas son más fáciles de camperizar?
Las más fáciles de camperizar son aquellas con carrocería cuadrada y amplia, ya que permiten aprovechar mejor el espacio. (Aunque esto no te tiene que limitar a qué furgoneta camper elegir). Por eso, modelos como la Fiat Ducato, la Peugeot Boxer o la Citroën Jumper son las más populares en Europa. También hay muchas opciones de kits prefabricados para furgonetas pequeñas como la Berlingo o la Doblo, lo que facilita mucho una camperización rápida y económica. En las medianas como la Renault Trafic o la Mercedes Vito, existe un gran mercado de muebles a medida, especialmente diseñados para quienes buscan un punto intermedio.